Al inicio de una relación pasa en todo momento.. 

… y conforme pasa el tiempo, es normal que en la mayoría de las relaciones la vida sexual sea menos intensa y menos frecuente.  

Nuestra cultura de romanticismo nos impuso la idea de que el amor y el sexo deben perdurar con el tiempo si todo va bien en la relación. 

Y si no es el caso, la sociedad lo toma como un fracaso. ¿Realmente es cierto? 

Para una vida en pareja se necesita compartir responsabilidades financieras, crianza de hijos, tareas del hogar, discusiones y mucha cercanía. 

Para la vida sexual se necesita lo contrario: independencia, libertad, curiosidad y emoción. 

Hay que admitir con dignidad y fluidez que el declive de la sexualidad es el precio natural de una relación a largo plazo. 

Y en muchos casos, este es un precio que vale la pena pagar. 

Hay que aceptar que las relaciones en las que el sexo perdura son las excepciones. No al revés. 

Es normal que la energía sexual se vea afectada si no se actúa activamente para cultivarla. 

Así que, ¿cómo recuperarla? Para hacerlo, hay que entender por qué se pierde la energía sexual y la emoción. 

Es emocionante al inicio poder tocar, oler, sostener y acariciar. 

En otras palabras, la emoción viene de poder poseer por un momento a alguien que no nos pertenece y es libre. 

 Es emocionante que alguien que puede irse de nuestra vida, milagrosamente decida quedarse

Amar a alguien muchas veces involucra querer poseer a alguien. 

Al quitar la individualidad e independencia, estamos quitando la misma energía de emoción que se necesita para estar con alguien.  

¿Por qué crees que los conflictos que involucran una real opción de separación terminan en la cama? 

Para recuperar la emoción, hay que recuperar la independencia y libertad. Entender que ambos se pueden ir en cualquier momento y ambos sobrevivirán. 

Es cierto, al inicio es nuestro instinto. Pero la epigenética ya lo ha comprobado, nuestros pensamientos pueden generar todas las hormonas y energía sexual necesarias para reconectar. 

Hay que cultivar el aprecio, el poder maravillarse y el agradecimiento. 

Si quieres cultivar una energía de aprecio para reconectar, esta baraja de preguntas es para ustedes: 

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